POESIA INTRAVENOSA

& esperando desaparecer...

Esta vez salgo de un esquema bastante rígido sobre el blog para decir lo que se me plazca.
Hace poco me volvieron a comentar en el blog (eso que lo tengo bastante botadito, no lo promociono ni le agrego nada, asi que me parecio genial) y aproveché de actualizar mi perfil.
Se me acaban de apagar los dos celulares, así que incomunicada telefónicamente estoy (sino fuera por el bendito internet)
Debería haber hecho esto hace tiempo creo.
La distancia me ha traído buenos y malos momentos. Buenas y malas nostalgias. Buenas y malas experiencias. Buenas y malas ilusiones. Y muy malas decepciones.
Aunque lo último, claramente está, es sólo mi culpa, ya que soy fielmente seguidora de la linea en que las decepciones ocurren por esperar más de lo que pueda suceder, por lo que no hay que esperar nada y sentirte feliz con lo que venga. Así como un "peor es nada".
Se consideran ustedes siempre los mismos? En donde estén?
Yo si. Aunque no parezca que soy la misma.
De pasar a ser florerito de mesa en mi colegio a ser alguien super piola en la U, es una gran diferencia. Realmente, una gran diferencia. Pero es que estoy probando el terreno recién y está tomando menos tiempo que en el colegio (8 años, toda la enseñanza básica para despertar recien en primero medio y darme a conocer).
Me agrada la nueva gente que está a mi alrededor. Me hace enojar con facilidad por su flojera, pero me cuidan. Además, son ellos los que llevan la batuta para la diversión y eso me agrada, como yo no conozco mucho acá. Además hablamos de todo.
Pero por el otro lado, soy de las que no olvidan el pasado. Nunca nadie reemplazará a mis buenos amigos de Curicó. Bueno, a los que creo buenos... o creía hace un rato.
Siempre me han dicho que la gente va y viene en nuestra vida, pero para mí, que soy tan bruta cuando de amar se trata, se me hace un poco difícil renunciar a aquellas personas. Y esperando lo mismo a cambio, como que no resultó el capricho.
Más de un amargo momento me ha dado por ver que el resto sigue, cambia y yo me quedo igual. Amándolos de la misma manera y esperando algo que quizá jamás vendrá. Y ahí siempre pienso que yo ya fui por la puerta de salida al irme tan lejos.
Fui mezquina? Sí, me alejé por salud mental.
Pero no para perderlos... perdí el pan o el pedazo? No sé. Pero ahora ganas de volver a Curicó no tengo, así en definitiva, iría por un ratito... a lo necesario... y que es lo necesario?
No sé, porque donde no ayudas, mejor no estorbas.
Así que ahora no voy más.


-.-